domingo, 3 de julio de 2011

Meet McQueen

La gracia de los genios reside en que hay pocos. Un pequeño grupo de escogidos que con su maestría revolucionan y maravillan al mundo entero con sus creaciones. Hoy quiero hablaros de uno de esos genios que se dan de tarde en tarde, y que nos dejó el año pasado. Se trata de Alexander McQueen.


Nacido el 17 de marzo de 1969 como Lee Alexander McQueen en Londres, dejó el colegio muy joven porque tenía claro que quería ser diseñador de moda. Se graduó en el exclusivo St. Martins College of Art & Design de la capital inglesa en la misma promoción que John Galliano y Stella McCartney.


Comenzó como aprendiz en el taller de los sastres Anderson & Sheppard, y fue pasando de firma en firma hasta crear la suya propia, contando entre sus clientes a personajes de la cultura como Isabella Blow. Fichó por Givenchy en 1996 y llevó ambas colecciones a la par.


Su maestría en el corte, su creatividad sin límites, su poderosa ambientación en las colecciones gracias a su obsesivo control de los detalles y ese lirismo que transmiten sus piezas, hacen que cada uno de sus vestidos sea una obra de arte en sí mismo.


Sus méritos se materializaron al recibir el título de comandante de la Orden del Imperio Británico de manos de la propia reina, mención que recogió exclusivamente para satisfacer a sus padres, ya que era anarquista y antimonárquico.


Sus diseños parecen sacados de un cuento gótico: drapeados, complicadísimas superposiciones y tejidos con caídas sencillamente espectaculares.


Una de sus especialidades era la capacidad de crear texturas y sensación de piel, escamas, superficies.... con los tejidos. Mariposas, papel, caparazones, criaturas marinas... nada escapaba a su inventario.


Pero el pasado 11 de Febrero de 2010 fue encontrado ahorcado en su apartamento tras ingerir una explosiva mezcla de cocaína, somníferos y tranquilizantes. Justo 10 días después de la muerte de su madre, desde la que había caído en una profunda depresión.


Su primer desfile póstumo se celebró en una íntima sala de Versalles (arriba). Tras su muerte, tomó el mando de la firma su mano derecha durante los últimos 12 años, Sarah Burton, que sigue su espíritu con sumo cuidado y pasión.


Después de su muerte, sus numerosos seguidores y admiradores no han dejado de rendirle homenajes. Lady Gaga, a la cual vestió por completo en su vídeo "Bad Romance", y con cuya canción abrió el desfile de esa temporada, le ha escrito la canción "Fashion of his love", incluída en su último disco, "Born this way", y Kate Middleton, la futura reina de Inglaterra, le escogió para vestirla en su boda (al igual que su hermana).


Además, en la primera parte de la última entrega de Harry Potter, "Las Reliquias de la Muerte", el personaje Fleur DeLacour viste en su boda un modelo de McQueen, con dos poderosos pavos reales cuyas colas forman la falda de vuelo.


Ahora y hasta el 31 de Julio el MET de Nueva York exhibe una selección de sus 100 diseños más espectaculares e icónicos llamada Savage Beauty, de la que podéis ver una muestra aquí. Un repaso a la vida y obra de uno de los enfants terribles de la moda que supo dotar a sus patrones de sensibilidad e historia. Era un artista, que en vez de pintar o esculpir, creaba moda.


Su maestría a la hora de combinar y crear nuevas tendencias no se quedaba en la ropa: cuidaba cada detalle de sus muestras, ya que los complementos, el maquillaje y el peinado formaba parte también de la obra final; todas debían encajar y funcionar a la vez.


Es por ello que sus creaciones hay que verlas de cerca. Para poder apreciar los bordados, los plisados, las pequeñas incrustaciones de piedras preciosas, los estampados de las telas... en definitiva, los detalles.


Y sin perder importancia, y como bien decían nuestras abuelas, una mujer se viste por los pies. Y sus zapatos no podían ser menos.


Auténticas esculturas bizarras que lo mismo podían recrear el más profundo medievo, el simbolismo más soñador o el futurismo más innovador. Calzado nada cómodo, pero que cumple su función. Hacer soñar.


Y cerramos con su creación más icónica en materia de complementos. Más concretamente, de clutchs. Una pequeña cartera de mano de forma cuadrada, con multitud de estampados y recreaciones a lo largo de las temporadas, cerrada por un pequeño broche en forma de calavera.


¿Qué os ha parecido su obra? ¿Conocíais a este grandísimo diseñador? Espero que os haya gustado, ¡no dudéis en comentar!

4 comentarios:

  1. Wow!!
    No había oido hablar de él. Sus trajes son espectaculares, aunque muchos los veo poco útiles para la vida real, jeje.
    Los detalles de los peinados y los zapatos es lo que más me ha fascinado! *.*

    ~HappyWoman~

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  2. sin palabras :O autenticas obras de arte...

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